14.2.07

CRONICA DE UN VIAJE A CISJORDANIA ( 3ª Y ULTIMA PARTE)







Imagenes de Jerusalen de dia realizadas por Veronica Alcacer. de arrb. a abj.: vista Jerusalen-Bazar Arabe y un Domingo cualquiera en la plaza del Muro de las Lamentaciones










Esta es la ultima crónica de mi viaje a Palestina, quizás hoy no sea el mejor momento para escribirla, ya que el pasado de nuevo ha vuelto a mi cuando creía que la maldad se había alejado de mi nueva vida. Pero en fin hay veces que tenemos que enfrentarnos de nuevo y levantarnos a cerrarle la puerta para siempre e impedir que aquellos que una vez nos dañaron vilmente, no vuelvan jamás hacerlo, ni dejar que utilicen otra vez nuestro corazón y buenos sentimientos.

Solamente queda viva la esperanza de un futuro el año que viene, en una tierra a la que amo, donde la luz hace que las cúpulas doradas, brillen y nos hacen sentir que podemos tocar el sol con la punta de nuestros dedos. Donde la mirada ausente y triste de sus habitantes son mi fuerza y meta para volverlas aunque sea por unos momentos, dichosas. Donde la esperanza del regreso de su tierra fértil jamás se pierde, donde mis cuentos infantiles de duendes de garbanzos, quizás algun día se hagan realidad. Mi vida esta en la tierra donde a través de la mirada se llega a descubrir el alma humana.

Después de nuestro desagradable incidente en Nablus, como ya he comentado volvimos de nuevo a Jerusalén, haciendo pequeñas incursiones a Ramala donde teníamos entrevistas aun concertadas.

Hablar de Jerusalén para mí es hablar de olor a pan y menta y de magia. El único día que todo el grupo tuvimos libre, decidimos dividirnos en dos grupos para poder visitar la ciudad cómodamente. Ya habíamos conocido parte de Jerusalén por la noche a altas horas de la misma, y aunque la soledad reine en sus calles plagadas de historia, algo que solo se puede sentir y no se puede explicar con palabras, la envuelve por completo. Por el día la calma desaparece y el bullicio retorna a sus plazas y mercados.

Parte del grupo quiso ir a tomar fotografías del Jerusalén Judío, a mi la verdad que no me apetecía en absoluto, pues quien conoce bien Jerusalén, sabrá de la diferencia de vida existente entre las dos zonas, y para mi entrar en la plaza donde se sitúa el Muro de las Lamentaciones, aparte de no ser agradable, pues la imagen de los cientos de jóvenes soldados Israelíes armados hasta arriba, riéndose y sintiéndose orgullosos de portar una Uzzi (entre otras amas), llena de balas, no hacia sino descender aun mas mi energía y aumentar mi tristeza.

El resto el pequeño grupo después de tomar algunas fotos, mientras Vero, Issa y yo permanecíamos al margen de todo, se decidió ir a ver la parte árabe y callejear por su increíble bazar. No podéis imaginar como al pisar la primera losa de piedra de esta zona, mi semblante cambio, donde antes había incomodidad y tristeza, ahora solo había sonrisas y locura infantil por mi parte. Como si de una niña que acababa de descubrir donde estaba su felicidad, se tratara, andaba por las callejones sin miedo e ilusionada, intentando pararme a mirar cada puesto de artesanía, comida o textil y hablar emocionada con quien los regentaban, pero aunque ese era mi deseo, la marcha del grupo, hizo que solo pudiera cumplirlo en alguna de las tiendas y no en todas. Pero por primera vez en mi vida me sentí dichosa, es difícil de explicar, pero descubriendo por primera vez sus sinuosas y laberínticas calles, no me sentía perdida sino que formaba parte de ellas, como si de un regreso esperado se tratara, como si mi cuerpo y mente ya las conocieran de antemano aun sin haberlas visto jamás, tan solo en algún sueño..

Una de las dos excursiones obligadas, seas o no creyente cuando vas a Palestina, es ir a ver en Belén, la Iglesia de la Natividad (donde se dice estaba situado el portal de Belén) y en Jerusalén el Santo Sepulcro, donde dicen enterraron a Jesús. Las dos iglesias sorprenden por su humildad exterior, pero dejan sin palabras al contemplar su interior. La decoración es Ortodoxa, cientos de matices de rojo, oro y piedra emergen ante tus ojos, miles de años que guardan todos los secretos, como la muestra de la existencia de los Templarios grabadas en una de las paredes de piedra. Miles de cruces Templarías grabadas en la roca, por las cientos de ordenes que llegaron hasta Jerusalén, que te dan una muestra mas de porque es mágica esta tierra. Visitamos y como es costumbre metimos la mano para tocar la piedra del Santo Sepulcro y no se si por coincidencia o algo que se escapa de nuestra lógica, al director del documental cuando hizo este gesto, se le rajo al momento la esfera del reloj, estallando de dentro a fuera y a mi la cámara de fotos digital que funcionaba correctamente se me bloqueo, sin encontrar el modo de dispararla, apagarla o de volverla a encender, se quedo como loca, sacando y metiendo el zoom, hasta que se apago sola y luego se disparo de igual forma. La explicación a los dos hechos “extraños” aun no la sabemos, y quizás nos de miedo averiguarlo, seria empezar a creer en algo que una vez anulamos, la fé, ya que nos dijeron que no había inhibidores de frecuencia en todo el recinto. Un misterio más de los que guarda Jerusalén en sus piedras.

Después nos juntamos con el resto del grupo que se había ido por libre para comer todos juntos en Ramala y terminar allí nuestra ultima entrevista a Maha Nassar, una mujer Palestina, educadora, ex prisionera política, miembro del Frente Popular para la Liberación de Palestina y de la Liga Socialista Palestina y presidenta de la Unión de Comités de Mujeres en Palestina, que lleva toda su vida luchando por las mujeres y que con lagrimas en los ojos me dijo: "I’m tired to fight" (estoy cansada de luchar), he de decir que Maha Nassar a día de hoy es enferma terminal de cáncer y le queda muy poco tiempo de vida, esa entrevista a cámara cerrada y esas palabras y mirada me marco durante toda la mañana y son dificiles de olvidar.

Ya por la tarde de regreso al hotel donde estábamos alojados, el Hotel del Monte de los Olivos, donde la vista desde lo alto de la ciudad es increíble, cada uno se fue a las habitaciones a terminar la maleta, pues al siguiente día volábamos para Madrid y mas que a terminar la maleta, a limpiar todos los bolsillos y destruir todas las pruebas físicas de que además de Jerusalén, habíamos visitado la Cisjordania ocupada, ya que en el aeropuerto al salir te lo revisan TODO, y al haber entrado de turismo, no era seguro para nosotros decir que habíamos estado aparte de en Jerusalén, también en; Nablus, Ramala, Jericó, Hebron, Belén, etc..Esta situación para mi era indignante y muy penosa, pues el tener que deshacerme de tarjetas de visita que con cariño gurdaba e información de la labor de las Organizaciones de Mujeres que habíamos visitado y que muchas ya formaban parte de mi corazón, me resultaba muy triste y no daba crédito a lo que tenia que hacer para poder salir sin problemas, ya que el resto de las cintas, fotos y demás material de trabajo salían sin problemas por valija diplomática de Jerusalén a Madrid.

Ya por la noche fuimos parte del grupo a celebrar por Jerusalén nuestro ultimo día, la verdad es que para mi la noche no fue buena, después de cenar con algunas personas ajenas al grupo y muy desagradables y egoístas por cierto aunque se vanaglorian de pertenecer a la ONU, son ante todo personas muy soberbias y maleducadas y a los Palestinos nunca les tratan de igual a igual, solo les utilizan para sus fines, en fin, como he dicho, después de cenar pensábamos ir a tomar unas cervezas al Diwan, un sitio de la Free Zone (Zona libre de Jerusalen), donde jóvenes Palestinos e Israelíes toman copas juntos independientemente del bando al que pertenezcan mientras se escucha de fondo a los Dj’s mezclando música techno (un pequeño local que sirve de ejemplo para la PAZ), pero debido a la insistencia de los Internacionales de ir a otro sitio, acabamos en una macro discoteca de techno, en el barrio Judío, rodeados por un montón de militares de permiso (eso creo, por sus vestimentas de paisano), que sin importarles lo mas mínimo tener que coger el arma después, se metían de todo por la nariz y la boca, eso me explico muchas cosas, entre ellas que yo no quería permanecer ni un momento mas, aunque acababa de entrar en ese local y me fui a la furgoneta a fumarme un cigarro y a esperar a que viniera el resto del grupo que estaba terminando sus cervezas

La noche acabo llevando a casa a una de las internacionales que con su comportamiento soberbio, egoísta y maleducado, se ganaba puntos para que la tiráramos en marcha de la furgoneta, pero al final he de decir que la dejamos en su casa, sana y salva pero con la esperanza todo el grupo de no volverla a ver nunca más en la vida. Esos son los ejemplos que os he hablado de gente que “va de buena por trabajar en una Organización Internacional" (y que hacen daño a las ONG's que de verdad son legales), y que solamente estan en ella para lucrarse y viajar gratis y no para ayudar a quien lo necesita e intentar apoyar al pueblo que dicen ayudan. Pero la verdad siempre sale ante los ojos que miran con el corazón.

A la mañana siguiente, el grupo salio dirección Tel-Aviv a coger el avión, la tristeza se mezclaba con la alegría de algunos de volver a casa. Mi caso era distinto, la tristeza de dejar el que sabia era mi sitio, mezclada con la tristeza de volver al que no era mi sitio, y sumado a la tristeza de despedirme de tantos corazones. Todo el camino intente ocultar mis lágrimas, mirando por la ventanilla, sin girar la cabeza. Cada vez que me iba alejando mas de Jerusalén, Ramala, Hebron, Jericó y Nablus, mi corazón se encogía y se hacia mas y mas pequeño. No quería volver y quise en varias ocasiones no hacerlo, pero mi presupuesto era muy escaso y me impidió cambiar el billete de vuelta.

La llegada al aeropuerto después de haber sido registrado de nuevo la furgoneta en un checkpoint, fue lo mas triste, ahi nos esperaba el avión que nos llevaba de vuelta a Madrid, vía Barcelona, y ahi estaba también el final. Intententamos todos desperdirnos de Issa con un leve abrazo , ya que una de las interminables preguntas que te hacen en el Aeropuerto de Ben Guiron es si conoces al chofer que te ha traído, a lo que tienes que responder que “no, que tan solo de recogerte y traerte”, nos hubiera gustado despedirnos con un gran abrazo , pero hubiera sido muy perjudicial para el grupo. Una vez dentro del aeropuerto rompímos a llorar, por dejar Palestina, y por la impotencia de no poder hacer nada en ese momento para remediar la situacion de enjaulamiento constante a la que son sometidos diariamente los Palestinos. En ese momento tuve que controlar muy a mi pesar mis impulsos arianos y no gritarles a los Israelíes ¡¿Por qué estáis haciendo esto?!..¡Dejadles en paz ya!, pero solamente lo grito mi cabeza que silencio mi boca, tan solo por el bien del resto del grupo.

Todo el viaje fui hablando con mi amiga Vero, que la verdad consiguió con su dulce voz que me calmara. Al llegar al aeropuerto de Madrid, allí estaban esperando para darme por una sorpresa sin yo saberlo mis queridos amigos de “Abrazos Gratis” que con sus carteles y alegría, me hicieron de nuevo reír. ¡Gracias chic@s!

Desde que he llegado a Madrid, vuelvo a tener insomnio y pesadillas, tan solo dormí placidamente, aunque fueran pocas horas en Palestina, porque su silencio y su magia me acunaban como una nana cada noche y mi alma dormia tranquila porque sabia que estaba "en casa".

Mi cabeza y mi corazón están tristes desde que llegue y no pasa un solo día que no añore llorando el que ahora es mi lugar, mi alma grita por volver, mi cuerpo necesita sus calles, mis ojos necesitan los de su gente y mi corazón no quiere estar aquí, sino en la tierra donde el olor a pan y menta lo embriaga todo. Palestina.

FIN

Gowa kalbi ana hassa nafsi arabeia

Mi corazon ha encontrado el lugar al que pertenece y desea volver muy pronto....

10.2.07

CRONICA DE UN VIAJE A CISJORDANIA (2ª PARTE)

Nablus o Naplusa es una de las ciudades mas grandes e importantes después de Jerusalén, por eso alberga una de las universidades. Llegar a Nablus es conocer el horror sufrido en vivo. Para entrar a ella, viniendo de Jerusalén, tienes que pasar antes por varios checkpoints, en nuestro caso siete, donde una y otra vez tienes que mostrar tu pasaporte y esperar a que el soldado (mujer u hombre indistintamente, ya que el servicio militar para los Israelíes es obligatorio y de por vida) este de buen humor ese día y te deje pasar sin problemas y esperas. El más importante de los checkpoints esta situado a la entrada de Nablus, el de Hawara. Contemplarlo es indignante, carros blindados a ambos lados del camino, decenas de militares armados hasta los dientes y una valla metálica al lado derecho de la carretera, coronada por una pequeña puerta metálica en forma de torno giratorio, donde por mucho que lo intentes solo puede pasar una persona a la vez. A cualquier hora del día hay cientos de personas agolpadas en este estrecho pasillo de campo de concentración, indistintamente, hombres, mujeres, niños pequeños y ancianos, pues todos los Palestinos que quieran entrar y salir de Nablus para cumplir con sus quehaceres diarios deben sin miramientos esperar su turno, independientemente del tiempo atmosférico que haya, y rezar para que esta vez les dejen pasar los soldados. Allí da igual si uno esta muy enfermo, tiene prisa o no, el ritual es siempre el mismo, el soldado mira la tarjeta de paso, vuelve a mirarla y lo mismo a su propietario (ya he dicho que da igual si es una mujer cargada con bolsas de alimentos, que viene de trabajar, un niño o un anciano enfermo), si al soldado de turno se le antoja “porque si” que ese día esa persona no pase, no lo hará, y ya podrá llorar, suplicar o patalear, que será en vano. Aparte de rezar para que les dejen pasar, esta gente también debe hacerlo para que ese soldado, tenga un corazón, y no lo tenga de hierro como las balas que dispara y no este aburrido deseando divertirse con el o ella. Es decir rezar para que no le haga pasar ninguna humillación o vejación, por el solo hecho de ser palestino. Nosotros tuvimos la gran suerte de pasar sin problemas, quizás el hecho de que el monovolumen estaba bien identificado por todos lados con las siglas TV bien visibles, o porque nosotros si tuvimos suerte y ese día nos toco “el soldado con corazón” ¿quien sabe?..

La imagen que se presenta nada mas entrar a Nablus es entristecedora, decenas de casas derruidas por los bombardeos junto con otras de recientes construcciones recién empezadas. Los palestinos, son gente que nunca se rinde, y si una bomba o un carro de combate les han destrozado, su casa, al poco tiempo, con sus propias manos, sin ayuda de ningún tipo de tecnología y si el status de la familia lo permite, empiezan a levantar una nueva, sobre las ruinas de la antigua. El paisaje por lo tanto es desolador, decenas de casas derruidas mezcladas con construcciones de esperanza de un nuevo hogar.

Llegamos al hotel, no sin antes pasar a visitar a la madre de nuestro amigo Hafez de Madrid, una encantadora y maravillosa madrileña, casada desde hace mas de 20 años con un Palestino de Nablus (Doctor del Campo de Refugiados de Balata), con el que además de Hafez, ha tenido dos hijos mas, L. y Y. Su casa esta vigilada desde lo alto por una caseta de francotiradores que apuntan sus armas a su terraza, pero el espontáneo carácter español de M.E, le restaba importancia al hecho y cuando subimos a la terraza, nos decía: ¡Saludar a mis vecinos, mírales allí están..holaaaa!. Ella se alegro mucho de vernos, aunque no nos conocía en persona y las convencimos que se vinieran las dos mujeres de la familia con nosotros a comer con los niños del campo de refugiados de Asker, parte de nuestros niños que conocimos en Madrid. Pero no imaginábamos la desagradable sorpresa que nos íbamos a encontrar al llegar al centro de ocio de Asker, allí solo estaban 3 del total de los 12 niños ¿el resto?, nos pedían dinero si queríamos verlos, si ¡increíble! pero en el campo de Asker hay dos personas miembros paralelos de una organización española que les hacen de sicarios, en el sentido completo de la palabra, Nosotros nos quedamos perplejos con esta petición, ya que nuestro único interés era estar disfrutando esa tarde con los niños jugando con ellos, pero parece ser que el destino nos ponía en el camino de descubrir una trama de corrupción española, de la que sentimos vergüenza por pertenecer al mismo país ayudados por dos personas sin escrúpulos, que siendo del mismo pueblo y diciendo que ayudan a esta pobre gente, les tienen sometidos y chantajeados, pidiéndoles a cambio de amenazas diversas un dinero que no pueden pagar las familias, y todo ello centralizado en una organización que se hace llamar así mismo ONG con sede en Madrid cuyo nombre PAZ AHORA, es una paradoja que insulta, y que por envidia aparte de impedirnos realizar nuestro trabajo, nos impidieron realizar una de nuestras ilusiones y motivo del viaje, el estar con los niños. Pero dicen que cuando haces las cosas de verdad con el corazón, la providencia te ayuda, nosotros somos así y no buscamos nada a cambio, pues por este documental encargado por el CJE (Consejo de la Juventud de España), ninguno de los 9 miembros del equipo hemos y recibiremos compensación económica ninguna, solo la satisfacción personal de un trabajo bien hecho que ayudara a otras personas. Todos hemos dejado durante 12 días nuestros respectivos trabajos en España, todos hemos trabajado arduamente de sol a sol, solo a cambio de poner imágenes a las voces que mas sufren, para que una vez editado este documental, el CJE se encargue gratuitamente de distribuirlo a todas las universidades y centros escolares Españoles junto con un dossier, para sensibilizar a los juventud española de lo que verdaderamente esta ocurriendo en Palestina y se haga algo para parar este holocausto. Esa es toda la verdad de porque estábamos en Palestina, para ser la imagen de las voces de los que sufren, sin callar nada. Pero claro la envidia el deporte nacional de España, es muy mala y esta gentuza de la organización, en vez de colaborar y facilitarnos nuestro trabajo, pues ingenuamente nosotros suponíamos que al igual que para ambos, los Palestinos eran lo mas importante, decidieron ver si podían sacar tajada para llenarse sus sucios bolsillos. Pero aunque nuestra inexperiencia en “amenazas y mafias” es escasa, nuestro corazón es limpio, como el de esas gentes a las que amenazan y chantajean diariamente, al igual que fuerte es nuestra innata rebeldía contra las injusticias, por eso este tema tan desagradable tiene que acabar y para ello ya hemos movido este asunto a nivel gubernamental y a las autoridades pertinentes españolas con las pruebas necesarias para acabar con este desagradable tema. No podemos permanecer ciegos a tanta desvergüenza, bastante es lo que esta sufriendo esta gente, para que encima gentuza de este país "que dice ayudar a Palestina" se aprovechen aun mas de su desgracia, respaldandose en sus sicarios de Asker que también viven a todo lujo (uno en Barcelona, y otro allí en Nablus) a costa de las propias personas de su pueblo y de su ciudad. ¡¡Basta ya!!.

Pero también como en todo existe la otra cara de la moneda, dos manzanas podridas no estropean este cesto que es la maravillosa gente Palestina, gente increíble que arriesga su vida por contar la verdad, gente que solo desea ayudar a su pueblo sin pensar en nada mas y que es feliz cuando un grupo de jóvenes españoles van a ser sus emisarios con Occidente de lo que realmente esta pasando. Personas increíbles y maravillosas como toda la gente de la Palestine Youth Union que ya forman parte de nuestro corazón.

En Nablus también hemos sido testigos de lo que es una noche cualquiera, encerrados por nuestra seguridad vital en un hotel mientras de fondo en las calles, se escuchan los disparos entre Hamas y Al Fataa. También hemos sido testigos en primera persona de las humillaciones de los checkpoints, fue regresando del campo de refugiados de Al Faraa, de ver al resto de los otros niños, que al contrario que en Asker, no tuvimos ningún problema y la experiencia y el recuentro fue increíble, no todos son iguales que estos desgraciados mafiosos.

La verdad es que esta es la anécdota divertida de todo el viaje, digo divertida porque así la hicimos nosotros, pero otra persona cualquiera lo hubiera pasado muy mal en nuestro lugar ¿cuantas cientos de personas habrán logrado humillar como intentaron hacer con nosotros?... Como he dicho regresábamos de Al Faraa camino al hotel de Nablus y nos sorprendió un jeep militar Israelí parado en medio de la carretera, que nos dejo pasar, pero decenas de metros después nos obligaron a parar en un checkpoint. Los soldados después de comprobar nuestros pasaportes y credenciales, riéndose entre ellos nos hicieron bajar del coche, ponernos en fila a un lado del arcen mientras revisaban con un perro la furgoneta entera, solo por el simple hecho de divertirse, mientras claro para que estuviéramos tranquilitos nos enseñaban orgullosos y sonrientes sus armas. He de decir que eran casi niños, como mucho tendrían 19 años recién cumplidos, y allí estaban orgullosos de divertirse un rato con los españolitos de la tele. Pero algo ocurrió allí y en fila, muertos de frió en el arcen, empezamos hablar con ellos, pero de una manera curiosa: “¡Eh Johnny (uno se llamaba así), que esta dice que eres muy guapo que vengas que te tira una foto”, y cosas por el estilo, claro Johnny se sonrojaba y nos amenazaba con el arma, pero nosotros dale que dale con las conversaciones absurdas. El frió empezó a calarnos los huesos y ante el impedimento entre risas de los soldados de coger nuestros abrigos y apuntándonos para que les obedeciéramos, nos animaban a mirar lo bonito que era su país ¡¡grrrrr!!, así que para entrar en calor y bajo la atónita mirada de los soldados Israelíes, de Issa y de nuestro amigo de la Palestine Youth Union que nos acompañaba en este viaje, estos 9 colgados españoles nos pusimos a cantar a voz en grito: Chambao, El Bicho y todo tipo de canciones folklóricas españolas (o sea flamenco), acompañándonos de palmeos andaluces y movimientos de sevillanas. El espectáculo era de circo, nosotros nueve montando nuestra propia fiesta flamenca, las risas contenidas de Issa y nuestro amigo de Nablus y de fondo la mirada de autentica perplejidad de todos los soldados Israelíes del checkpoint, que sin dejar de apuntarnos solamente repetían una y otra vez: “ They are crazy!”, claro y como en España tenemos canciones para todos los momentos, nos arrancamos sin dudar con una coreada: ¡¡no estamos locos y sabemos lo que queremoooossss...” de Ketama, las risas contagiosas entre nosotros ya eran imposibles de disimular y quisimos dar un giro a nuestra actuación, ya que veíamos que nuestro publico, (los atónitos y flipados soldados que no daban crédito a lo que pasaba), merecían el numero final, ¡¡malabares con naranjas!! (de una bolsa que llevábamos para quitarnos el hambre en el viaje) y como broche un ¡¡payaso!!, nuestro amigo de Ayamonte, uno de los cámaras, con una inmensa nariz roja, los pantalones subidos hasta las axilas, caminaba tirando las naranjas al aire muy profesionalmente acompañado por la música del circo que nosotros hacíamos como coro con la boca. Los soldados se frotaban los ojos mientras nos apuntaban, aunque ya muertos de la risa no dejaban de decirnos: “You're crazy!”. Con esta tontería conseguimos varias cosas, la primera, entrar en calor, la segunda quitarnos la tensión, la tercera, que mientras los militares atónitos miraban el espectáculo, dejaban pasar sin problemas y sin parar a las pobres familias Palestinas que volvían a sus hogares, que entre la perplejidad de lo que estaban contemplando, una vez pasado el control y asomados algunos por la ventanilla, se reían mientras nos hacían la “uve” con sus dedos (símbolo de Palestina) y lo mejor de todo que aquellos soldados que quisieron reírse y humillar a un grupo de Españoles por el hecho de divertirse esa tarde, recibieron de su propia medicina y los que eran humillados se rieron de ellos en sus propias narices sin saberlo siquiera, ya que en nuestra vida nos imaginábamos haciendo el payaso de aquella manera y menos aun bailando y cantando a grito pelado y desafinando sevillanas y pasodobles. Una vez que nos dejaron marchar fueron despedidos por parte de todos con ¡un adiós chavales, cuidado no matéis a nadie Johnny! Y una voltereta lateral a modo de Cappoeira dada en la puerta por nuestra querida Vero, en cuanto cerramos las puertas de la furgoneta e Issa arranco el motor, las risas frenéticas invadieron todo, el de la Palestine Youth Union sin parar de reírse nos decía de nuevo: “Estáis locos, pero sois increíbles” y nosotros pensábamos: “pues la verdad que si estamos como cabras pero que nos quiten lo bailao!” (nunca mejor dicho). Además nos sentíamos muy bien por haber impedido que mientras nos retenían sin motivo aparente, no hicieran lo mismo con la pobre gente Palestina, una buena obra no exenta de peligro, pero que consiguió su fin.

En Nablus pasamos dos de los tres días que teníamos previstos, ya que un poco atemorizados con las continuas amenazas y posteriores desagradables situaciones vividas por culpa de los sicarios de esta corrupta organización Española, decidimos por nuestra seguridad adelantar la vuelta un día y regresar de nuevo a Jerusalén. Entre todos nos secamos nuestras lagrimas de rabia, y nos volvió de nuevo fuertes para poder seguir con nuestro trabajo, el de poner imágenes a las voces que están sufriendo.

Todas las experiencias negativas vividas en Nablus se transformaran en lágrimas de alegría cuando fuimos a visitar el campo de Refugiados de Balata (Nablus). Una pequeña extensión de cuatro kilómetros cuadrados donde viven afinados 35.000 Palestinos, un autentico hormiguero de minúsculas casitas hechas con ladrillos y uralita, la mayoría niños, donde por desgracia Issa paso algún tiempo allí viviendo con su familia, antes de poder irse todos a vivir a Jerusalén.

Un campo de Refugiados donde la risa e ilusión de los niños lo invadía todo cuando aparecimos, donde sus maravillosas gentes nos recibieron con los brazos abiertos, pues éramos puros de corazón y con mirada limpia, donde llorando un anciano desconocido a algún miembro del equipo le agarro con cariño las manos mientras le decía: “por favor no penséis que los Palestinos somos gente mala por lo que os esta llegando a vuestro país de los enfrentamientos entre Hamas y Al Fataa, nosotros no queremos eso, solo deseamos vivir en paz todos juntos con nuestras familias, por favor no penséis eso, aquí el verdadero problema es la ocupación que nos están haciendo y que tan solo deseamos que nos dejen vivir como personas compartiendo la tierra todos juntos y en paz”. Imágenes y palabras como estas se quedan grabadas en la retina para siempre.

Pasamos en Balata uno de los días mas maravillosos de nuestro viaje, junto con la tarde que pasamos en el campo de refugiados de Jerusalén, que ya os contare mas adelante. Los niños de Balata que eran centenares y salían por todos lados como hormiguitas, disfrutaban con nuestros cámaras, haciendo a veces de improvisados reporteros televisivos, cuidando la cámara que se les dejaba con un mimo sorprendente, grabándonos a nosotros, a sus amigos y al resto de niños. Otros del grupo nos dedicamos a jugar con los niños, haciéndoles ingenuos trucos de magia y malabares e intentando aprender entre risas sus nombres, se reían por nuestra mala pronunciación aun así ponían todo su empeño y cariño en enseñarnos. Posaban como modelos para nosotros y luego ellos nos hacían de fotógrafos. Echamos una partida al futbolín, reímos, jugamos, cantamos y por unas horas la felicidad reino en todo el campo, sus madres nos sonreían con afecto al ver la alegría de sus pequeños. He de deciros que en Balata TODAS las familias que allí viven, sin omitir ninguna han perdido a alguien de su familia, es decir les han matado, un hijo, una hija, un padre, una madre, un primo, un tío...todas han sufrido la perdida de alguien muy querido, pero aun así saben reconocer aquel que llega con el corazón y la mirada limpia, con el único deseo de traer un poco de alegría y felicidad a sus confinadas vidas, abriéndoles su corazón de par en par. Este increíble pueblo tiene el “don mágico” de mirar a través de los ojos y descubrir sin engaños el alma de la gente y reconocer sin dudar a la “gente bonita de corazón”.

Ese día todo el grupo por primera vez en Nablus, lloro de felicidad y cogio de nuevo fuerzas para seguir luchando por mostrar la verdad…..

CRONICA DE UN VIAJE A CISJORDANIA (1ª PARTE)

De arrb a abj: Niños de Ramala, con raquitismo producido por la falta de alimentos cuando los soldados Israelíes dedicieron sitiar la ciudad y no dejar pasar ni salir a nadie de ella durante varios meses y en la otra foto parte del muro de la verguenza que rodea totalmente Ramala, con la torreta de francotiradores vigilando el checkpoint de entrada y salida a la ciudad- Fotos de Veronica Alcacer





Hablar ahora de Palestina para mí, es aun más difícil que antes. Si en el pasado defendía a capa y espada a este pueblo hoy confinado en su propia tierra, una vez que he visto con mis propios ojos la realidad que no llega a Occidente, solo puedo sumarme a una frase que Rachel Corie dijo en su momento: “Ningún libro, conferencia o documento, me podía haber preparado para la realidad de esta situación. Uno no puede hacerse a la idea a menos que lo vea”.

Quizás yo iba con la mente bastante clara de lo que me podía encontrar en mi viaje, pues en ningún momento dude de la injusticia que esta sufriendo el pueblo Palestino, pero el verlo con mis propios ojos y sentirlo en mi propio corazón a confirmado aun mas mi decisión de que en cuanto pueda volver alli, porque son muchas las manos fuertes, los corazones puros y las miradas limpias que necesita esa gente, no Organizaciones Internacionales que para mi vergüenza, se aprovechan del pueblo al que dicen “ayudan” y lo único que hacen es vivir a todo lujo a costa de ellos. Para mi ha sido una vergüenza y gran tristeza, trabajando en una pequeña ONG como trabajo, comprobar que algunas de estas grandes organizaciones solo se están lucrando de los que mas necesitan ayuda aprovechándose de ellos. Dicen que una persona no puede cambiar el mundo, pero yo soy de la afirmación “que si quieres puedes” y aunque no lo consiga por lo menos lo habré intentado. No todos somos iguales, algunos como yo nacieron con las manos fuertes, el corazón puro y la mirada limpia y ese es el medio para poder cambiar las cosas.

Llegamos el día 9 de Enero al aeropuerto de Ben Guiron aproximadamente a las 16h, y aunque el madrugón y el cansancio de las 5 horas de viaje (con escala en Barcelona), no hizo que perdiéramos la sonrisa. Verónica y su amigo Issa, que amablemente nos hizo de chofer del monovlumen, de guía y traductor, nos estaban esperando a la salida del aeropuerto.

Cuando cogimos la carretera dirección Tel-Aviv a Jerusalén, donde estaba nuestro hotel, el paisaje poco a poco fue cambiando, de repente nuestro ojos se fijaron en la gran pared de piedra que limitaba la carretera “el muro de la vergüenza”, que a simple vista podría parecer un muro de sonido, pero que en realidad son las paredes de una cárcel. El muro se extendía mas allá de donde la vista nos alcanzaba, delimitando el pueblo Palestino de los Steelman Judíos, que son asentamientos desperdigados por toda la montaña, a simple vista parecen cúmulos de urbanizaciones, pero encierran una realidad que espanta, cada familia judía que se traslada a estos asentamientos, aparte e disponer de su propia vivienda, disponen también de cuatro francotiradores por familia ¿para defenderse de que?... Curiosamente cada Steelman suele estar orientado a una población Palestina, en lo alto de las lomas, como si del castillo de un rey cruel en el medievo español se tratara. Apuntando las torres de sus francotiradores a la población civil y en muchos casos a patios de colegios, como pudimos comprobar en la cuidad de Belén, donde un día antes de nuestra llegada, dispararon desde el asentamiento a una niña de 5 años que jugaba en el patio del colegio, haciéndole que la bala le traspasara su estomago de lado a lado, ¿el motivo?, solo uno porque era una niña Palestina.

Con esta vista del muro y los asentamientos ya la indignación empieza aflorar en cada uno de las personas que forman nuestro grupo de rodaje y las preguntas comunes, poco a poco empiezan a sucederse ¿Por qué?...

Estuvimos tres días de grabación de entrevistas en Jerusalén, nuestro objetivo, entrevistas a mujeres Palestinas de todas las edades y condición social, para recoger en las cámaras la situación que están viviendo allí.

De camino a una de las citas concertadas en el Jerusalén Woman Centre, pudimos ser testigos de la horripilante realidad diaria que sufren los Palestinos, un muro horroroso que separa la ciudad de Jerusalén en dos mitades muy distintas, donde la única condición para pasar al otro lado, para ir a trabajar o estudiar es hacerlo por una pequeña abertura, rodeada de militares Israelíes armados hasta los dientes. Muchos Palestinos para evitar la humillación, burlas, ataques físicos injustificados y otras vejaciones, se deciden a sortear y escalar el muro por cualquier sitio lejos de los checkpoints. Nosotros y nuestras ocultas cámaras como he dicho fuimos testigos de como tres jóvenes saltaban el muro y como inmediatamente de la nada varios soldados Israelíes, corrían tras ellos con el arma empuñada y el seguro quitado, dispuestos a disparar cuando les tuvieran en el blanco. La providencia sonrió esta vez a estos jóvenes y lograron escapar ilesos y dar esquinazo a sus cazadores, que no disimulaban su indignación por su huida. Esto es el diario vivir de aquellos que tan solo por ir a seguir con su jornada diaria como cualquier persona, arriesgan su vida cada día. Nosotros nos preguntábamos ¿esta vez se han salvado, pero y mañana? ¿cuantos han muerto ya por intentar lo mismo que estos jóvenes?...

También comprobamos en cada mujer que entrevistamos, la realidad de lo que esta ocurriendo, al principio desconfiaban de nosotros, pues aunque Españoles y jóvenes, también éramos “Internacionales” (como ya he comentado son muchas las organizaciones que se lucran con ellos utilizándoles), pero una vez que les decíamos: “di lo que quieras, no te sientas limitada a ocultar nada, esta entrevista solo va a demostrar la realidad ”, entonces ellas hablaban desde lo mas hondo de su corazón. Todas las mujeres entrevistadas en este viaje, han llorado y nos han hecho llorar, cada vez que alguna contaba como habían entrado en su casa, sin hacer nada para merecerlo y las habían sometido a toda clase de vejaciones y torturas, tanto a ellas como a sus familiares. Hay el caso de una mujer de Belén que nos contaba como se le habían producido las marcas de su cara, un soldado Israelí la golpeo la cabeza contra la pared dentro de su propia casa, una y otra vez hasta romperle la nariz y desfigurarle el rostro, todo esto en presencia de su hija pequeña y únicamente por ser una mujer Palestina. El horror que ha sufrido y sufre esta gente solo es comparable a una pesadilla continua. Aun así el coraje, la bondad y la esperanza de la paz todavía anida en sus corazones, al igual que conservan esa gran llave de hierro (la llave de su casa), que según la tradición, es lo único que guardan cuando les han destruido las bombas sus viviendas o les han echado de ellas para ocuparlas, esa llave es su esperanza de algún día poder volver a su hogares. Al preguntarles si odian a los Israelíes, sorprendentemente nos dicen que no, que lo único que quieren es vivir en paz en sus casas, que los dos pueblos pueden convivir en paz compartiendo la tierra, que no les importa que vivan enfrente de ellos, pero que por favor no les echen de sus casas, que solo quieren vivir como cualquier persona. Son admirables y con una bondad para tomar ejemplo.

Una de las primeras entrevistas fuera de Jerusalén, fue a varias mujeres de Ramala, desde estudiantes, hasta mujeres cuyo sufrimiento vivido a través de los años, marcan como surcos profundos sus arrugas y las hacen parecer mucho mas mayores de la edad real que tienen. Ramala es una de las ciudades, junto con Nablus, donde por desgracia se sitúa uno de los checkpoints más importantes que impide el paso a los que vienen hasta allí de Jerusalén. El gran muro de piedra lo rodea todo, flanqueado por dos enormes torretas de vigilancia que albergan a los francotiradores. Entrar en Ramala es empezar a conocer la situación que están viviendo los Palestinos, confinados, encarcelados al antojo de los Israelíes, pero aun así con un atisbo de esperanza reflejado en sus ojos, e intentando seguir con su vida diaria, que solamente se rompe, cuando los tanques Israelíes deciden entrar arrasarlo todo para que no olviden los habitantes de Ramala “quien controla realmente la situación” , entran sin avisar, un día y por sorpresa, entonces la calma tensa de Ramala, se vuelve un continuo correr e intentar esconderse de sus habitantes. Ramala cuando esta tranquila, es todo color, amabilidad y centenares de personas por la calle y sus coloridos y fantásticos mercados de deliciosas frutas y verduras (los mejores fresones que he comido en mi vida son los de Ramala). Todo el mundo se saluda amablemente, incluso a nosotros nos saludaban con un “Shalam” o “Marhaba”, cuando nos veían. Algunos hombres al vernos a todo el grupo con los pañuelos Palestinos que muy orgullosos todos llevábamos puestos al cuello, nos preguntaban: “¿Hamas o Al Fataa?, nosotros les mirábamos y haciendo la “uve” con los dedos, solo les contestábamos: “Only Free Palestine”, ellos se sonreían y nos decían un: “Thanks” emotivo y sincero.

Uno de lo días que acabamos pronto la jornada de entrevistas. Issa decidió llevarnos a Jericó, la ciudad mas antigua del mundo, atravesada con una de las calles con más historia del mundo, más de 3000 años tiene esa carretera o camino. Jericó es precioso, coronada en lo alto por el Monte de las Tentaciones. Después de comer y ya anocheciendo (pues allí a las seis de la tarde ya es noche cerrada), y con la pena de no haber podido subir con tiempo al Monte de las Tentaciones, con una caja de cervezas a ver anochecer, Issa decidió llevarnos a otro mágico lugar de esta bella tierra, al Mar Muerto. Llegamos aun más de noche a una de las playas del Mar Muerto, controladas por los Israelíes, que nos pedían 30Sk (más de 5 euros por cabeza por tan solo visitar la playa), así que decidimos probar suerte en otra playa. Encontramos una libre de pago, y totalmente a oscuras, solamente guiados por la luz de la luna, bajamos todo el grupo hasta el agua. El Mar Muerto esta a 400m por debajo del nivel 0 del mar, se llama así por que su 100% de salinidad hace que no pueda existir ningún tipo de vida en sus aguas. El agua esta caliente a unos 20º o mas, y su fuerte salinidad no impidió que tres de nuestros arriesgados compañeros se dieran un baño, mejor dicho lo intentaran, ya que por el efecto de la gran cantidad de sal, lo único que puedes hacer en sus aguas ¡es flotar como un corcho!, por nada del mundo te hundes, solo flotas. La cara y gritos de sorpresa y alegría de nuestros compañeros bañistas, hizo que la total oscuridad y soledad de la playa se llenara con nuestras carcajadas. El resto del grupo, nos tumbamos en las piedras de la orilla a contemplar uno de los espectáculos mas bonitos jamás vistos en la naturaleza. Un silencio total, una calma increíble y un inaudito cielo plagado de estrellas que hacían soñar, un cielo tan limpio que nos permitió ver varias estrellas fugaces. Un espectáculo impresionante y mágico.

Pasamos mas de dos horas en el Mar Muerto, cantando, bebiendo cervezas, algunos bañándose y otros maravillándose por la oscuridad total y el mágico cielo, luego recogimos todos, los bañistas se lavaron con agua limpia, ya que al secarse la sal hace que la piel escueza y de nuevo montados en el coche nos dirigimos a nuestro Hotel de Jerusalén, a recoger las maletas por que temprano al día siguiente nos íbamos a Nablus.

El sábado 13 llegamos a Nablus, para pasar dos días, estar con “nuestros niños” que tantas ganas teníamos de verlos y grabar algunas entrevistas. Todas fueron iguales que las anteriores, mucho dolor que aflora en forma de palabras que hacen una y otra vez brotar sus lagrimas y las nuestras, pero la mas impactante fue la que sin haberla planeado, surgió como surgen las cosas, pues nosotros solo entrevistábamos mujeres, como he comentado fue en la Universidad Al Najah de Nablus. Antes de poder grabar recursos y entrevistas hay que seguir el protocolo de hablar con el responsable para que nos de permiso. Fuimos hablar con el rector que amablemente nos recibió y entre formulismos burocráticos de palabras, se sintió cómodo y empezó a relatarnos el calvario que viven los estudiantes universitarios cada día para poder estudiar. Tanto nos impresionaban sus palabras cuando comenzó a relatar estos hechos, que le pedimos por favor si podíamos grabarle mientras. El nos comento que no le importaba que lo hiciéramos, pero solo el sonido de su voz, no su imagen, el motivo estaba amenazado y que una semana antes en mitad de la noche tres soldados Israelíes del modo patada en la puerta, entraron en su casa, donde dormía el, su mujer y sus tres hijos. Después de maniatarlos y vendarles los ojos a toda la familia, los situaron de rodillas en fila delante de ellos, amenazándoles que si se movían los mataban, durante toda la noche no pudieron moverse de esta posición, ni les permitieron siquiera ir al baño, mientras los soldados se burlaban de ellos, el único motivo que le dieron para haber invadido su casa y la intimidad de su hogar fue este “venimos a dormir en tu sofá”, y es lo que hicieron mientras se turnaban para dormir, el rector y su familia maniatados y con los ojos vendados pasaron toda la noche sin moverse y controlando con gran sufrimiento sus necesidades fisiológicas, por que estaba en juego sus vidas. Al amanecer les liberaron y se marcharon tal y como habían llegado, burlándose de ellos. A los pocos días otro profesor de la Universidad, sufrió algo parecido, solo que a el no le ataron sino que entraron en su casa a medianoche le dispararon en las piernas y se marcharon entre risas.

Nuestras lagrimas ya resbalaban por nuestra piel al oír esto pero se acentuaron cuando empezó a contarnos el caso de uno de los cientos que ocurren a diario a los universitarios que solo quieren ir a estudiar a la facultad.

Nos enseño dos fotos sin rostro, correspondían a una joven musulmana estudiante de la facultad, que uno de los días que atravesaba como era costumbre un checkpoint para ir a clase, dos soldados Israelíes entre risas mientras la apuntaban con el arma sin seguro (como es costumbre que la lleven siempre), la hicieron quitarse el velo, no contentos con la humillación, la hicieron quitarse mas prendas de ropa. En uno de los brazos descubiertos de la joven, uno de los soldados vio una marca en la piel, la pregunto si era un tatuaje, a lo que ella respondió que no, que solo era una marca de nacimiento. El no la creyó y empezó a reírse, su compañero de checkpoint aprovecho a sujetarla fuertemente, mientras el otro cogia del suelo un cristal roto de una botella. La chica lloraba y pedía que la dejaran en paz, que no había hecho nada malo, pero ellos querían divertirse a su costa y sujetándola fuertemente, con el trozo de cristal roto, la grabaron en la piel de un brazo la estrella judía de 6 puntas, la única razón que la dieron era que ellos si la iban a tatuar algo bonito y entre sangre, gritos de dolor, lagrimas y suplicas de la chica, la marcaron, por la única razón de ser una joven Palestina que el único pecado que había cometido era el ir cada día a estudiar.

Cuando acabo de relatarnos uno de los cientos de casos de vejaciones que sufren los estudiantes de la universidad de Nablus, nuestros lloros impidieron que prosiguiera con mas ejemplos de humillaciones y acabamos allí la entrevista, a lo que el añadió: aun así quieren estudiar y ser alguien en la vida, muchos de ellos han decidido vivir confinados y apiñados en pequeños pisos cerca de la universidad, para no tener que sufrir humillaciones cada día y no perder su vida si se arriesgan a saltar el muro. también nos contó que muchos estudiantes se dividen la carrera entre sus hermanos, seis meses va uno y seis otro, porque no pueden pagar por si solos la renta anual de los pequeños pisos en los que viven apiñados, así que uno enseña al otro lo aprendido durante el semestre que ha estudiado, los libros con los que estudian no son de segunda mano, sino de décima o undécima mano, se nota por su papel ya descolorido, pero aun así los cuidan como si fueran nuevos, solamente el tiempo pasado causa el destrozo en ellos. La universidad Al Najah de Nablus junto con la Universidad Al Quads de Jerusalén son las dos más importantes de Palestina.

No son historias inventadas sino historias reales de personas como nosotros grabadas con una cámara. Aun así la esperanza, el coraje y la bondad jamás la pierden, al igual que la esperanza de un mundo en PAZ.


Estoy llorando mientras escribo esta primera crónica y ahora no puedo seguir, os prometo que la terminare aun quedan muchas cosas que contar y que para nada quiero ya callar, pero entender que me es difícil recrear tanto dolor e indignación de nuevo en mi mente.

Aun me queda por contar como muchos muchachos han conocido la cárcel y las torturas a los quince años de edad, por el simple pecado de ser palestinos.

El destino y el corazón siempre saben donde llevarnos, aunque hayamos sufrido un camino tortuoso y doloroso para llegar hasta el, porque al final la recompensa que hayamos supera con creces el dolor vivido en el pasado. Todos estamos predestinados a algo, nuestro deber en la vida es descubrir cual es nuestra misión en ella.....

EL AMOR















Es el amor. Preserva tus entrañas,
que la pasión no es fácil,
y todo lo que elige se consume,
aunque tenga razón.
Vive libre de él,
que la calma de amor es la fatiga,
dolencia es su comienzo, y muerte su final.
Para mí, sin embargo,
el morir por amor es un vivir,
y el favor se lo debo a aquel que amo.
Te doy estos consejos
conociendo muy bien qué es el amor,
pero si tú prefieres contradecirme,
elige por ti mismo lo que te plazca.
Si deseas vivir gozosamente,
muere mártir por él; sI no lo haces,
el amor tiene ya su propia gente.
Quien no muere de amor, por él no vive.
Y la miel no se puede cosechar
sin exponerse al daño de las abejas.

Ibn Al-Farid

5.2.07

NUNCA SOÑE

Volvi el dia 19 de Palestina, pero todavia no he podido escribir la cronica del viaje, tanto se ha acumulado en mi alma, mis ojos y mi corazon, que muy poquito a poco se va liberando como el aire que se escapa de un globo.
Os prometo que en breve pondre la cronica y mas fotos de mi viaje, pero de momento os dejo una imagen tomada en las calles del zoco de Jerusalem que vale mas que mil palabras y una pincelada en forma de versos de como mi alma se siente despues de regresar........

NUNCA SOÑE

Nunca soñé Jerusalén, pero imagine sus calles
bañada por la extraña vida, que refleja su piedra
recordada por la historia en sus cuentos y leyendas
de perfumes que embriagan con olor a pan y menta.

Cada vez que la recuerdo, mis palabras enmudecen
mis lágrimas afloran, tibias como el agua muerta
buscando imágenes que me trasporten hasta ella
cerrando los ojos para traspasar sus puertas.

Nunca soñé Jerusalén, pero mi alma la buscaba
ansiando mis sitio, sin hallarlo en años y meses
hasta que mi corazón se quedo en sus viejas calles
que me suplican pidiendo que yo pronto regrese.

Soñé con mi lugar, donde el alma se funde feliz
mezclándose con la luz de la mirada de bondad
donde las palabras sobran, para poder decir todo
donde el Árabe bazar marca el camino a andar.

Nunca soñé Jerusalén, pero ahora ya conozco
que pertenezco a su tierra, donde su pueblo
hoy esclavo, sueña con regresar libre a ella
y mi vida sin su luz, es una falsa moneda.

Nunca soñé Palestina, ni imagine mi felicidad
cada vez que lloro lo hago tan solo de alegría
porque se que mi alma por fin encontró su lugar
y que ya conoce el sitio donde crear su felicidad.


Sonia
سونيا

P.D.: Creo que pocas palabras bastan para decir que los caminos de mi vida desembocan en Palestina, donde mis ojos ven con el corazón. La ciudad donde la leyenda dice "que puede visitarla cualquiera, pero que solo los Profetas, Santos y Ángeles quieren quedarse, para siempre", por ese motivo ya habreis intuido que el año que viene, este "Angel" regresara, donde el olor a piedra se mezcla con el de pan y menta. Mi corazon ya es 100% Árabe y alli esta lleno y rebosante de fuerza para seguir haciendo felices a los demas...